Mantener un adecuado gobierno corporativo es clave para determinar las prácticas de cada empresa y así lograr servir a la sociedad de manera responsable, ética y transparente.
Hoy en Chile, se hace más necesario trabajar en este tema, dado que muchas empresas han estado en tela de juicio por conductas de colusión, información privilegiada usada en beneficio propio y un irregular financiamiento de la política que afecta al mercado y por sobre todo tiene costo de imagen importante.
La reputación debe trabajarse desde el inicio del funcionamiento de una empresa, que es donde se considera la dimensión legal y regulatoria, además de la financiera y economía dirigida a la atracción de inversionistas y a la estrategia orientada a la creación de valor.
Lograr una adecuada reputación toma tiempo y requiere el compromiso y transparencia de autoridades y proveedores que debe demostrarse, además de establecer confianza tanto con los propios trabajadores como con los consumidores.
En un artículo de la Revista Capital, Álvaro Clarke, presidente de ICR Chile y ex superintendente de Valores y Seguros, dice: «cuesta entender entonces que tantas organizaciones no muestran un mayor cuidado con este activo tan sensible y vital. El gobierno corporativo es la garantía de confianza y reputación de una firma».
Clarke analiza que «la visión de largo plazo, las políticas, normas, procesos y patrones de conducta que constituyen un buen gobierno, no son sustitutos de la honestidad y competencia de los trabajadores y ejecutivos».
«Tampoco son, por sí mismos, suficientes para asegurar un buen desempeño económico. Pero su presencia resulta fundamental para que los stakeholders y la sociedad puedan tener mayor confianza en la misma. Los directorios de las empresas deben hacer su mejor esfuerzo para evitar situaciones que lesionen severamente su reputación, sino corren el riesgo de lamentar escándalos que eventualmente sean de alto costo para sus accionistas o, en el peor escenario, pueden terminar con la viabilidad de una compañía», concluye Clarke.